Anuncian exposición fotográfica de tortugas el 25 de octubre en el Faro Carranza
Anuncian exposición fotográfica de tortugas el 25 de octubre en el Faro Carranza
Autoridades y ciudadanía deben unir esfuerzos para proteger a las tortugas y no consumirlas porque contienen mucho colesterol, expresó Alma Gómez Jurado, bióloga y docente de la Secundaria Técnica Pesquera de Boca del Río.
Al anunciar que este viernes 25 de octubre a las 4:00 de la tarde se abre en el Faro Carranza una exposición fotográfica sobre esa especie destacó la importancia de no agredirla ni interrumpir su ciclo reproductivo.
Explicó que en promedio una tortuga marina puede poner más de 500 huevos, pero el índice de supervivencia es bajo, sobre todo por los depredadores naturales y el ser humano.
"Entre las gaviotas y otros organismos que se las comen, y el humano que es el depredador principal, disminuye la población.
"El pescador lo toma como que es una necesidad, cuando su tarea es pescar, no capturar. Él busca una ganancia y se hace un circulo vicioso: el que compra y el que captura, y esto va a continuar", lamentó Gómez Jurado.
Dijo que en el Pacífico hay más control y conciencia ciudadana, con grupos que se organizan y protegen a los quelonios. Ahora se debe hacer lo mismo en el Golfo de México.
Admitió que las autoridades sí hacen su parte, en el caso de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente.
Para ello se requiere que la ciudadanía denuncie el saqueo furtivo.
COLESTEROL
La profesional de la acuacultura confirmó el riesgo de consumir y abusar de la ingesta de tortuga marina, pues resaltó que puede ser dañina para el ser humano.
"La tortuga marina contiene mucho colesterol, es más alto que el del camarón. Es mentira que sea afrodisíaco, científicamente no está demostrado; al consumir varios huevos de tortuga la persona puede sentir mareo, por tanta proteína que contiene y hay que ser prudente al consumirlo o mejor aún, no comerlo", subrayó Gómez Jurado.
Dijo que en Canadá y Estados Unidos sí se consume en algunos puntos, pero bajo mucho control y no hay venta informal.
Llamó a las autoridades boqueñas a contribuir a generar conciencia en la conservación de esa especie, sobre todo ahora que ya se han registrado avistamientos en sus playas.