Acusa influyentismo de su esposa en caso de violencia

La violencia intrafamiliar no sólo es sufrida por mujeres, hay hombres que también son víctimas, tal como Deiby Hernández González, quien no sólo ha sido vulnerado por su esposa, sino por las autoridades, pues debido al tráfico de influencias de una alta funcionaria de la Refinería de Minatitlán, le negaron su derecho a comparecer y a conocer el expediente.

Todo comenzó la noche del 5 de octubre, cuando tras regresar de una reunión a su domicilio en la colonia Frutos de la Revolución, su esposa Blanca Margarita Flores Vargas discutió con él, tomando una navaja con la que primero le provocó heridas leves en el abdomen y luego en el pulgar derecho, dañando uno de sus nervios, posteriormente quiso lesionarlo con un cuchillo.

Lo amenazó al grado de decirle que si no regresaba a su hogar, se desquitaría con la hija de ambos, hasta que llegó su suegro a gritarle, por lo que decidió irse al área de urgencias en el Hospital General de Zona 36 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), para que lo atendieran en punto de las 00:30 horas del 6 de octubre y saliendo a las 06:00 horas ante la falta de un traumatólogo y un cirujano plástico, regresando pero sin éxito alguno, acudiendo a una clínica particular.

“Tengo firmas de mis vecinos, me firmaron 26 vecinos… ese día que estábamos en la vivienda mi esposa se comenzó a alterar, insultó a mis papás y los corrió del domicilio… metí la mano y fue que me lesionó el pulgar derecho, me rompió el nervio extensor…regresé y la encontré desorbitada, en un estado totalmente inconveniente… para no hacer más grande la situación opté por retirarme y por la herida me fui a urgencias”, narró Hernández González.

COMIENZA EL SUPLICIO

A su llegada a Diario del Istmo, Deiby Hernández presentó documentación que avala su denuncia presentada en la Fiscalía Especializada en Delitos contra la Familia, Mujeres, Niñas y Niños y Trata de Personas, bajo la carpeta de investigación UIPL-DXXI/999/2019/F2 por el delito de lesiones, en donde comenzaría el viacrucis por el presunto tráfico de influencias, esto el 8 de octubre y tres días más tardes promovió un depósito judicial a favor de su hija debido al temor de que su esposa le hiciera daño, acción que fue le fue concedida.

“Después de mi cirugía llegué de nuevo a mi casa, ella accedió completamente normal, me preguntó que qué tenía y me llevé a mi hija a casa de mis papás… seguí llevando a la niña al kínder, pero al ver comportamientos extraños de mi esposa opté por dejar de llevarla, porque había sujetos siguiéndome… el día 12 de octubre mi esposa en compañía de su tía Amanda Vargas Prieto llegó a casa de mis papás a exigirme a la niña y a amenazarme, porque la señora es superintendente de la Refinería de Pemex y llegó a gritarme que no sabía con quién me estaba metiendo”, indicó el joven de 32 años.

Y es que a decir de éste, Amanda Vargas Prieto es contadora en la Refinería General Lázaro Cárdenas del Río, de Petróleos Mexicanos (Pemex), por lo que al dar seguimiento a su carpeta de investigación, Deiby se enteró que Blanca lo denunció por violación, lo que también procedió.

“Por el influyentismo que tiene su tía, tiene nexos con la jueza y el esposo de la juez es el licenciado Abraham Serbón Palafox y con la fiscal auxiliar encargada de Despacho de la Fiscalía en Xalapa, Roberta Ayala Luna; las órdenes vienen directamente de Xalapa y yo al solicitar mi comparecencia, la licenciada Ariana del Rocío Soto Vázquez se negó rotundamente a prestarle a mi abogado defensor mi carpeta para comparecer, ya que recibió instrucciones de la fiscal Roberta Ayala”, detalló.

El joven teme por su seguridad física y su libertad, pues asegura que es víctima de un montaje en el que Amanda Vargas Prieto hace presunto uso de influencias con la fiscal Roberta Ayala Luna y el abogado Abraham Serbón Palafox para proceder en su contra por el delito de violación, del que se le acusa haber cometido contra Blanca Margarita Vargas en las mismas horas que Deiby Hernández estuvo internado en el IMSS.

“Quiere dañar y ensuciar mi persona por medio del influyentismo de su tía, temo por mi trabajo, por mi seguridad y la de mi hija, temo que le haga algo a mi hija estando con ella, quiero que se le haga justicia, la fiscal Ariana Soto no me ha dejado comparecer, le pido al gobernador y la fiscal encargada Verónica Hernández que me apoyen con la investigación, pues existen leyes de defensa a la mujer, pero también la equidad de género es importante para hacer valer los derechos los varones, que también somos violentados, que vivimos violencia familiar y por medio al qué dirán no denunciamos, pero me estoy armando de valor y pido justicia”, señaló Deiby Hernández.