La productividad del atún en el Golfo de México acabaría en tres años de no implementarse una veda urgente de la especie, por la sobreexplotación que se ha dado en los últimos años con la captura de la misma.
Aunque se ha exigido a Conapesca una veda durante la etapa reproductiva de la especie, en el pasado sexenio no se tuvo avance alguno y no se dio una solución, lo que ha generado que hasta en un 60 por ciento disminuya la reproducción del atún.
Juan Ramón Gánem Vargas, empresario atunero, indicó que hay quienes no quieren una veda en la temporada de desove, pero es una medida urgente que debe emplearse y que se buscará se ponga en marcha próximamente.
“Debemos considerar que los ecosistemas se están transformando actualmente, existen problemas serios a nivel global como derretimientos de los polos, terremotos, y otros fenómenos como el Niño o la Niña, pues los países capitalizados no les importa lo que pase alrededor del mundo”, acotó.
La propuesta que se ha planteado a la Conapesca es que el momento de la veda sea durante la temporada alta, cuando la hembra del atún acude al desove en los meses de mayo, junio y julio, cuándo la especie migra a aguas mexicanas.
Aseveró que anteriormente los armadores traían a 250 ejemplares en cada embarcación, pero actualmente esto ha disminuido drásticamente, aunado que ahora la especie es cada vez es más pequeña lo que se debe a que no se está dejando que llegue a su etapa reproductiva.